Las chinches son de mala suerte

Lee este post para descubrir si las chinches son de mala suerte o un simple rumor.

Desde hace años existe la creencia que si en tu casa o en una zona que frecuentas hay chinches atraerá la mala suerte.

Las chinches son de mala suerte

Es lamentable que esta creencia sea tan generalizada, pero es verdad. Así como la gente le teme a las avispas, las arañas o las serpientes, le temen a las chinches. No es solo que una persona se asustara si ve una chinche por primera vez, incluso si es solo en la televisión, sino que muchas personas se sentirán con ansiedad si saben que en su casa, cama, sofá también hay chinches. No se sabe si el mito de que atraen la mala suerte es real o no, ya que es algo completamente incomprobable, pero la realidad es que si es un dicho que lleva años rumoreándose.

Las chinches no son las plagas más peligrosas, pero sin duda son una de las más molestas. Pueden causar mucha incomodidad a las personas que los tienen en sus hogares y puede ser difícil deshacerse de ellos.

Las chinches son pequeños insectos que se alimentan de sangre humana. Han existido durante siglos y siempre han sido un problema en los Estados Unidos y el resto del mundo. Pero en los últimos años, las chinches se han vuelto más frecuentes debido al aumento de los viajes internacionales y los métodos de control de plagas que no funcionan tan bien como solían hacerlo debido a las leyes que no permiten muchos tipos de productos químicos que antes se utilizaban.

Hay muchos mitos sobre las chinches, algunos mitos sobre las chinches incluyen que no puedes deshacerte de ellas o que necesitan ser eliminadas con calor. La verdad es que las chinches se pueden eliminar limpiando y usando un protector de colchón confiable. Pero la verdad es que no son solamente una molestia, sino que pueden causar serios problemas de salud. Las chinches pueden transmitir enfermedades como el VIH o la hepatitis C si sus picaduras rompen la piel y entran en el torrente sanguíneo de la víctima.

Ya sabes que las chinches son de mala suerte o al menos es una creencia popular.